Uso de los compuestos Meclizina y Dimetil fumarat en el tratamiento de la EP

La enfermedad de Parkinson es un desorden neurodegenerativo causado por la degeneración selectiva de neuronas dopaminérgicas. Hasta la fecha, no se sabe a ciencia cierta qué es lo que desencadena su pérdida. Sin embargo, se han encontrado alteraciones en varios procesos que podrían desencadenar esta muerte celular, como el mal funcionamiento de las mitocondrias, del retículo endoplásmico o un aumento de estrés oxidativo. También se ha demostrado recientemente que se producen cambios a nivel metabólico, lo que puede conducir a la muerte celular. Entre estos cambios, destaca una reducción de la obtención de energía por parte de las neuronas ya que las mitocondrias, orgánulos encargados de la generación de energía, se encuentran deterioradas. Para subsanar esta deficiencia energética, las células pueden utilizan otras rutas menos eficientes para obtener energía como puede ser la glicólisis.

En el grupo de Genética Molecular del Desarrollo y Modelos Biomédicos de la Universitat de València trabajamos con modelos de la enfermedad de Parkinson generados en Drosophila (mosca de la fruta) y en células humanas, y basados en la falta de función del gen DJ-1. En un artículo recientemente publicado (Solana-Manrique et al. 2020), hemos demostrado que algunos enzimas implicados en la glicólisis se encuentran modificados por oxidación en los modelos, lo que produce un aumento de su actividad. Esto conduce a un aumento de la glicólisis y a una mayor obtención de energía por parte de las células, lo que permitiría contrarrestar la disfunción mitocondrial.

En este contexto, decidimos evaluar la eficacia de dos compuestos capaces de activar la glicólisis, la meclizina (MEC) y el dimetil fumarato (DMF), para comprobar si un aumento aún mayor de esta ruta podría ser beneficioso en los modelos. Encontramos que ambos eran capaces de aumentar la viabilidad en el modelo celular humano, y de reducir los defectos motores de las moscas modelo. Por tanto, estos compuestos podrían ser candidatos como futuros tratamientos para la enfermedad de Parkinson. Cabe mencionar que el DMF (Tecfidera®) está aprobado para el tratamiento de la esclerosis múltiple, y, la MEC es el nombre genérico del medicamento Antivert, indicado para el tratamiento del vértigo. Por tanto, nuestros resultados apoyan una posible utilización de estos compuestos como moduladores del metabolismo energético para la neuroprotección en la enfermedad de Parkinson.

 

RESUMEN REALIZADO POR NURIA PARICIO, investigadora de la Universidad de Valencia 

REFERENCIA:

Solana-Manrique C, Sanz FJ, Ripollés E, et al. (2020). Enhanced activity of glycolytic enzymes in Drosophila and human cell models of Parkinson’s disease based on DJ-1 deficiency. Free Radic Biol Med. 158: 137-148. doi:10.1016/j.freeradbiomed.2020.06.036

 

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